En muchas ocasiones atravesamos por situaciones de difícil resolución que sin duda alguna pueden provocarnos desesperación, pero lo cierto es que muchos de nosotros ante la desesperación y el desconocimiento, intentado solucionar o sanar nuestro ser, nuestra vida a través del trabajo energético y espiritual podemos involucrarnos con energías poco adecuadas para las distintas situaciones que estemos atravesando e incluso generarnos más enfermedad o problemas por omitir indagar más sobre el tipo de energía con el cual aceptamos operar.
Por este motivo, en base a mi propia experiencia como trabajadora energética y espiritual, te invito a que consideres algunas cuestiones antes de acceder a operar energética y espiritualmente con un facilitador-mediador.
1. Considera obtener un diagnóstico preciso sobre tu situación energética y espiritual a través de herramientas como el tarot, oráculos, videncia o canalización, que te permita obtener de parte del facilitador información clara y un plan de acción para tu situación en particular.
2. Pedí información clara en relación a las energías con las cuales opera el facilitador o trabajador energético y espiritual. ¿Para poder realizar con esa persona la operación (limpieza, abre caminos, sanación, etc.) debo integrarme a algún tipo de culto, religión o corriente espiritual? ¿Luego de realizado el trabajo quedo comprometido/a de alguna forma con una religión, culto, corriente espiritual, entidad, o algún ser? ¿Operando con esas energías me involucro en algún tipo de trato o pacto a nivel energético y espiritual? Las energías con la que opera ese facilitador, ¿pueden estar o adentrarse en algún tipo de conflicto con mi culto, religión o creencias?
3. Expresa al facilitador-mediador sin temor alguno, qué necesidad esperas satisfacer o qué problema esperas solucionar con las operaciones energéticas y espirituales, es decir corrobora si tus expectativas pueden materializarse o concretarse realmente, de ser así, ¿a corto, mediano o largo plazo?